jueves, 19 de febrero de 2009
El blog de un chico con 2 papás
Increible lo bien que escribe este chico. Me mata su inteligencia, su sensibilidad y su ternura. Que bien han hecho esos 2 tíos... Ojalá yo pueda hacer lo mismo con mi Lupe. Intento enseñarle la importancia de la tolerancia, el respeto a los demás, el diálogo, la empatía, etc. Ojalá me salga asi de bien.
El dice: " No son mis padres, los distintos. Son iguales entre ellos".
Nota: ¿Debería contarle a mi hijo su origen?
¿Se lo contamos?
Siempre en una relación afectiva es mejor no tener secretos, por lo que se sugiere contarle al niño sobre el motivo de su origen. Actualmente, la investigación científica en este campo aconseja no mantener en secreto la donación de gametos. Debemos tener en cuenta que el hecho de ocultar información crea una distancia entre quien no sabe y quien no quiere contar. Es así que, adoptar una postura de apertura y sinceridad con el niño favorecerá la relación padres-hijos, recordando siempre que el amor, el cuidado, los valores y las costumbres no se transmiten genéticamente.
¿Quién se lo cuenta?
Siempre sus padres, ya que cuando como padres tenemos algo que contarle a nuestro hijo, no debemos esperar a que otro se lo cuente. Tener una idea sobre cuándo y cómo se lo contamos, ayudará a que no nos tome por sorpresa la pregunta que siempre llega: ¿cómo me tuvisteis? ó ¿de donde vengo?
¿Cuándo se lo cuento?
A partir de los 3 años, y hasta los 8 años se considera un buen momento para contarle al niño sobre sus orígenes, ya que es cuando comienza a construir su identidad, su imagen de sí mismo y de los demás. Esto es, comenzar a responder cuando el niño empieza a preguntar. De esta forma, él mismo va pautando el ritmo en el que puede ir comprendiendo las respuestas. No todos los niños evolucionan de la misma manera ni con los mismos ritmos, por lo que, sugerimos decirlo a partir de los 3 años que es cuando suelen comenzar con preguntas sobre la familia, el nacimiento, etc., y no retrasarlo a épocas como la adolescencia o pre-adolescencia, donde siempre surgen conflictos típicos de esta etapa del desarrollo.
¿Cómo se lo cuento?Con un cuento o con analogías. Los niños pequeños suelen entender mejor lo que les explicamos, si utilizamos ejemplos que puedan comprender. Existen también cuentos donde, de una forma en la que el niño puede comprender, se ilustra su venida al mundo por donación de gametos. Es importante recordar que es bueno explicarle al niño lo que puede entender de acuerdo a su edad, y a medida que va pasando el tiempo, ellos mismos preguntarán detalles más específicos sobre sus orígenes.
¿Por qué se lo cuento?Porque no es más mío si no se lo cuento, y no es menos mío si se lo cuento. La carga genética que tiene un ser humano no determina sus gustos, sus formas de pensar, de sentir, de actuar y de amar. Estas características, que son los que finalmente constituyen a un ser humano, sólo se obtienen con la interacción paterno-filial, con la transmisión de valores y con la educación que les demos a nuestros hijos. Las relaciones padres-hijos están llenas de momentos de felicidad, pero también de enfado, dudas, miedos y fantasías. Si a estos momentos le agregamos que le estamos ocultando una parte de su historia, esto no ayudará a que pasen estos momentos difíciles y que predominen los de felicidad y complicidad en la relación.
Giuliana Baccino - I+D Psicología - Clínica FivMadrid
martes, 7 de octubre de 2008
Cómo se vive la maternidad lesbiana en el resto del mundo
La actriz Rosie O'Donnell dijo que es madre gay y chicos de parejas homosexuales cuentan sus experiencias por TV.
A la comediante y conductora de tv norteamericana Rosie O'Donnell nunca le importó demasiado hablar de su homosexualidad, pero lo que sí se encargó de ventilar para que todo el mundo lo sepa es que su lesbianismo no la ha privado de convertirse en la mamá de Parker, Chelsea y Blake, los chicos de 6,4 y 2 años que adoptó con su pareja. No creo que en los Estados Unidos sepan cómo es una madre gay. Bueno, yo soy una”, confesó en un programa de la cadena ABCNews. “Estos chicos no lo pasan bien y eso es triste. No le estoy pidiendo a la gente que acepte la homosexualidad sino que no permitan que estos chicos sufran por sus prejuicios.” Rob De Voogd, un chico de 17 años que vive en lthaca, Nueva York, sabe de qué se trata ese dolor. Va a una escuela progre pero viaja en colectivo con otros adolescentes que suelen burlarse de los gays. “Duele -admite Rob-, y es duro no tomarlo como un insulto personal porque mi madre es lesbiana.” A los 18, Ashley Hamess, de Minneapolis, dice que durante años no contó en la escuela que tenía dos mamás y que había sido concebida con esperma de un donante. “Me autocensuraba en clase y no decía lo que me pasaba. Recién a los l6 pude hablar” Para Jen Bleakley y Nina Jacobson, una pareja de lesbianas de Los Angeles, el tema surgió más temprano. Fue cuando su hijo de tres años comenzó a preguntar “¿tengo un papá?” para seguir tiempo después diciendo “Yo quiero un papá” y “Los papás son divertidos”. Fue ahí cuando Jen le explicó que había varios tipos de familias y que la suya contaba con dos mamás. Sin embargo Travis, un nene de 4 años criado por una pareja de gays, siempre contó su situación familiar con naturalidad. Había cumplido los 2 cuando le preguntaron por su mamá. “No tenemos una mami —respondió—. Tenemos dos papis y un Dingo.” Dingo era su perro.
Bélgica, Holanda, los países escandinavos, Quebec, en Canadá, y algunos estados norteamericanos como Nueva Jersey, Vermont o Connecticut, ya aceptan la adopción por parte de parejas homosexuales. La legislación Argentina no la permite.
En España estiman que el 75 por ciento de las mujeres solas inseminadas son lesbianas y según las organizaciones homosexuales, de los tratamientos de inseminación nacen cerca de 375 bebés por año.
La aceptación social nunca fue fácil. En julio de 1994, un médico le negó a la tenista Martina Navratilova, lesbiana confesa, la inseminación artificial. Ese mismo año, por primera vez, un juez de Manchester, Gran Bretaña, otorgó a una pareja lesbiana la crianza de un niño de 22 meses. En 1996 fue la primera vez que en el festival gay de Londres se abrió una guardería infantil y en abril de 1997, el Servicio de Salud estatal inglés financió el primer tratamiento de fertilización en una pareja de lesbianas. Por entonces, una investigación del diario The Sunday Times señalaba que más de la mitad de las mujeres tratadas en los institutos de fertilización asistida eran lesbianas.
Rosie O'Donnell fué portagonista de un programa sobro hijos de homosexuales, que emitió en EE.UU, el canal paro chicos Nlckelodeon. El canal recibió 100.000 e-mails y llamados de protesta, pero lo repitió.
jueves, 8 de mayo de 2008
¿Cómo hice? La pregunta del millón (Mamá de Lupe). Tercera parte.
Y sí el momento había llegado. La primera contracción comenzó a la 1.30 am.
en el curso preparto nos habían enseñado que las contraccione, generalmente, empiezan cada 5/7 minutos y además hay que esperar a que sean sistemáticas (es decir tenganla misma duración) y que se den de esa manera por lo menos durante media hora, para hí recién llamar a la partera...
La cuestión es que comencé a tenerlas cada 2 (DOS) minutos... Creo que no llegué a la media hora sin tenerlas cada minuto y medio... Llamé a Zulma, la partera, y no estaba o estaba ocupada así que me derivó con Teresita L, la partera suplente. La llamé a eso de las 2 am y al rato volvimos a hablar para encontrarnos a las 3 en el Sanatorio. CHAN!
Yo estaba sin depilarme porque estaba esperando para ir en la semana, mas cerca de a fecha PP.
Cuestión que con un dolor que me mataba, me metí en la bañera y entre contracción y contracción, me rasuré, jaja! Había aumentado 20 kgs (y si bien soy grande y alta, es mucho peso y estaba enorme) asi que imagínenme en la bañera.
Luego de la ducha y ya rasurada, mientras mi pareja pedía el remisse ("no fumador por favor") y mi mamá solo podía mirarme sin saber muy bienque hacer, usé la pelota de esferodinamia que me había comprado y me movía en ella tratando de concentrarme en hacer mis ejercicios y respirar para soportar el dolor. Las contracciones cada vez eran mas seguidas.
Hacía mucho calor. Llegó el remisse. Nos subimos y "rajamos" para el Otamendi. A las 3 estaba ahí. 3.15 me hicieron tacto y ya tenía 4 cm de dilatación. Directo, sin escalas, a la sala de partos.
Fabio tampoco estaba esa noche disponible, así que llamó al suplente: Mariano B (un divino total).
Me epreguntaron si quería la peridural. "SIIIIIIIII" contesté sin dudar. El dolor era insoportable y no quería ni que me hablaran.
La partera me pregutó quien iba a entrar conmigo y yo le dije "ella, mi pareja". "Ah, bueno, ningún problema". Creo que un poco se sorprendió.
Al poco rato ya tenía 8 cm de dilatación pero me quedé ahí. esperamos un rato largo y la niña no salía. Tuviero que pararme las contracciones... goteo... otra vez contracciones... nada. A las 5 am me dijeron que esperabamos hasta las 6 y si no... "si no que" pregunté... "ya veremos".
Yo estaba tranquila. todo el tiempo muy conciente de lo que pasaba. Me sentí muy cuidada. Estaba mi pareja, la partera, el médico, el anestesista, el monitorista y el neonatólogo... Eramos un montón y estabamos todo el tiempo escuchando sus latiditos. Cuestión que a las 6 am me dijeron que deberíamos ir al quirófano para que me realicen una cesárea porque no valía la pena esperar mas ya que estuve mucho tiempo con 8 de dilatación y si no salía era porque algo podía no estar bien. Me dieron a firmar el consentimiento (que obviamente nunca leí/mos) y me trasladaron al quirófano.
A las 6.46 sacaron la sabanita verde que tapaba la visión de mi zona pubica y pude verla salir. Fue un momento de lo más raro. Es como que no caía. La ví salir y, luego de cortar el cordón, se la entregaron a "Tata" en brazos, quién me la alcanzó y la puso en mi cara para que yo la llenara de besos. Recuerdo donde le di su primer beso. Siempre se lo digo y la vuelvo a besar justo ahí.
A los pocos minutos, y mientras a mi me cocían, Tata se fue con Lupe y el neonatólogo para que le hagan los controles de rutina.
Como a las 7.30 me llevaron a mi habitación y al ratito nomás me trajeron a mi hija, para que le dé la teta.
Esa primera toma, fue perfecta. De ahí no se desprendió hasta el año y medio, jajaja!
¿Cómo hice? La pregunta del millón. (Mamá de Lupe) Segunda parte.
A los 14 días ya estaba en fecha para menstruar. Días antes comencé a sentir olores muy fuertes que me daban asco. Mi mamá me decía "vos estas embarazada"; a lo que yo contestaba "mamá ni en pedo... lo mas probable es que no"... Era como que por un lado quería, deseaba estarlo, pero como sabía que a nivel estadístico mis posibildades eran bajas, mi razón actuaba de mecanismo defensivo y estaba convencida de que esa vez no sucedería.
Cuestión que el 24/4 al vover de la oficina, fuí al baño y tenía una ligera pérdida... "Zas! no quedé".
realmente me bajoneé. por mas que hubiese ientantado convencerme que eso podía pasar y era l mas probable, no me funcionó. Me tiré en la cama un rato y me sentí triste.
Al otro día la pérdida continuaba pero era raro. No me venía como siempre. Se me ocurrió hacerme un evatest que tenía en casa. Me dió POSITIVOOOOOOOOOOOOOOOOO. No lo podía creer. Miré la fecha de vencimiento y estaba vencido, jajaja! Obvio que al ir a la ofi, paramos en una farmacia y e compré otro, de otra marca, jaja! Por las dudas. Esperé que pasaran las horas necesarias, me banqué el ichín y por finme metí en el baño. Me dió + otra vez! No podía serrrr. yo seguía con pérdidas. Llamé a mi doc y me envió un análisis de sangre. or la tarde tuve el resultado. SI, estaba embarazada. No podía creerlo. Quedé en el primer intento.
No saben lo que es hacerse la primer ecografía... Ese puntito, tan minúsculo... escuchar los latidos. Yo SOY sensible, pero estaba potenciada. Lloraba por cualquier cosa, así que imaginene lo que fue cuando escuché sus latiditos...
A las pocas semanas, debido a un mal esfuerzo, tuve un desprendimiento. Me indicaron reposo por unos días (creo que estuve entre 7 y 10) a pura progesterona. Tenía un olor a pollo que apestaba, jaja!
En ese momento me reconcilié con Dios. Puse todo de mí, hice las cosas como debía, es decir, solo levantarme para ir al baño. Pero estaba convencida que estaba en manos de Dios, así que tuve una conversación con él y me entregué: "Será lo que deba ser".
Todo continuó perfecto. Tuve mis meses de sueño, de adaptación al nuevo estado (debo decir que es el mejor estado... me sentía una reina), de languidez, acidez, etc.
Al 2° trimestre todo había pasado. Creo que es el mejor. Me dediqué a hacer gimnasia para embarazadas, ejercicios de relajación, respiración, meditación y visualizaciones (porque le tenía terror al parto, jaja). También esferodinamia. Se los recomiendo chicas.
Durante este trimestre me enteré que "Lolo" sería Lupe. Todos estabamos convencidos de que sería un varón. Pero no, claramente era Lupe. Lana, que me acompañó a la eco, junto a Tata y a la otra abuela, se desilucionó por unos minutos, pero le dijimos que era mejor, que así podrían compartir juegos de nenas, etc. Al final del día ya estaba fascinada con la idea de Lupe.
Durante el tercer trimestre ya me sentía algo pesada asi que no veía la hora de llegar a diciembre para tomarme la licencia. Hice el curso preparto y ya estaba lista para pujar.
Este fue el trimestre de poner a punto todo: el cuarto, la ropa, los pañales, el cochecito, etc. Es todo un mundo...
Me leí todo lo que se imaginen relacionado con el embarazo y el parto. Cosa que me hizo decidir que desde el nacimieno ya no leería mas, jaja. Decidí que me dearía llevar por ella y por escuchar mi interior. Igual soy tan ansiosa que algo seguí leyendo.
Me anoté en un sitio de Internet para embarazadas, que cada semana te mandan como va creciendo el BB, que le va pasando y también a tu cuerpo.
Así llegó la licencia, me fui de la ofi, llegó el veranito y el año se terminaba. Lupe no llegaba. tenía fecha probable de parto para el 14/01 pero a mi se me había puesto que se iba a adelantar. Pasamos Navidad y Año Nuevo en Baires, nada de andar viajando a ver a la flia, sino estar muy cerquita del Otamendi.
Finalmente el 05/01/03 a la 1.30 am tuve mi primer contracción. Lupe estaba por llegar.
¿Cómo hice? La pregunta del millón. (Mamá de Lupe)
Durante los 2 primeros meses de 2002 fue cuando me/nos decidi/mos a tener el BB. Comenzamos por averiguar con quien hacerlo. Hasta ese momento me atendía con Sergio P, un ginecólogo con mucha trayectoria pero que a mi gusto era un poco frío. Y en este asunto sí que me quería sentir segura, cómoda, contenida y en confianza. a fin de cuentas estaba por emprender "mi gran empresa".
Entonces comencé a averiguar por clínicas de fertilización pero nada me convencía. No les recomiendo la de Nicolás N.
Así fue que mi pareja consultó con su gineco y el nos recomendó a su socio, Fabio S., que justamente se dedicaba a fertilización. Hablamos con él, le contamos cual era nuestra realidad y estuvo todo bien. Nos habló de las posibilidades, estadisticamente hablando, teniendo en cuenta mi edad (30), las veces que podríamos llegar a intentar, etc.
El primer mes (marzo) fue de pruebas. Ver como estaban mis ovarios, mi cuello, los conductos, etc. Ecografías y otros estudios. Todo rutina. Ya sabíamos que estaba en perfectas condiciones de comenzar.
Mientras hacíamos estos estudios, Fabio nos envió a un banco se semen en la calle Libertad (CryoB) y tuvimos la reunión con el Dr. Ariel L., quien nos contó como era el procedimiento. Ahí
nos enteramos quienes eran los donantes (generalmente estudiantes), que se podía y que no elegir, etc. Logicamente, y es lo que les recomiendan y recomiendo, busquen donantes con características similares a las suyas. Ej: color de piel, tipo y color de cabello, color de ojos, etc. ya que luego tendrán menos que explicar, jaja!
Del donante solo nos dieron 5 datos: altura, color de ojos, color de pelo, carrera que estudiaba y que ya tenía un hijo (no nos aclararon si por este mismo medio, aunque así lo supusimos).
También nos contó que además a la muestra convenía exponerla a un procedimiento llamado swim up, que es uan evaluación de la movilidad de los espermatozoides (como una prueba de calidad de semen seleccionado).
Bueno, teniendo en cuenta mis fechas de menstruación y días fertiles (soy muy regular) me indicó que me realizara una ecografía para evaluar el número y desarrollo folicular y los dosajes hormonales de sangre. Ahí (12 hs antes del día D) llamé una enfermera para que me diera una inyección de HCG para producir la ovulación. Aclaro que no es estimulación ovárica.
Fue todo como de película, todo cronometrado. Todo calculado. A las14 hs del día 10/04 ibamos a hacer el primer intento.
Un par de días antes llamé al banco para avisar que el 10/04 a las 13.30 aprox, estaríamos retirando la muestra elegida. Y así fue.
Ese medio día fuimos al banco y retiramos la muestra. El consultorio de mi doctor estaba a unas pocas cuadras, entonces teníamos que llevar el "frasquito" encima (es como un fraquito de muestra de perfume para que se den una idea). Tenía que ir a temperatura corporal, así que te indican que hay que llevarlo entre las "lolas".
Ahí fue cuando la futura "Tata" dijo que ella quería transportarla en su cuerpo. Y, efectivamente, así fue. Ella llevó el otro 50% de nuestra futura BB en su cuerpo... Antes que yo. Es todo muy loco, ¿no?
Llegamos 5 minutos antes y a las 14 hs exactas entramos en el consultorio.
Entregamos la cánula comprada en la farmacia y la muestra. Me senté en la camilla, abrí las piernas, intenté relajarme y comenzamos.
El procedimiento fue muy sencillo. Me puso la cánula (que es como una jeringa muy larga y finita) con el semen y listo. Fue como hacerme un PAP. Ella me acompaño en todo momento por supuesto. Se quedó al lado mío y me sostenía de la mano.
Volví a la oficina. Nada de andar de patas para arriba ni irse a la cama.
A la noche festejamos por supuesto. Quizás ya teníamos a nuestro BB en camino...